El
desayuno
Me
gustas cuando dices tonterías,
cuando
metes la pata, cuando mientes,
cuando
te vas de compras con tu madre
y
llego tarde al cine por tu culpa.
Me
gustas más cuando es mi cumpleaños
y
me cubres de besos y de tartas,
o
cuando eres feliz y se te nota,
o
cuando eres genial con una frase
que
lo resume todo, o cuando ríes
(tu
risa es una ducha en el infierno),
o
cuando me perdonas un olvido.
Pero
aún me gustas más, tanto que casi
no
puedo resistir lo que me gustas,
cuando,
llena de vida, te despiertas
y
lo primero que haces es decirme:
«Tengo
un hambre feroz esta mañana.
Voy
a empezar contigo el desayuno».
(Luis
Alberto de Cuenca)
Siempre me encantó ee poema, y Luis Alberto de Cuenca tiene varios así de irónicos y divertidos.
ResponderEliminarUn beso Carmela.
Yo lo descubrí hace poco Marcela, y me encantó.
EliminarUn beso!!
La fantasía de estas olas se viste con sus espumas más delicadas, maravillosas fotos! Besos.
ResponderEliminarSe han puesto de gala para la ocasión, :)
EliminarUn beso, Leovi
Cómo me gusta lo que tus ojos ven..
ResponderEliminarGracias Maritina!!
EliminarUn beso
Olas de nata espumosa!
ResponderEliminarBesos y salud
Siempre las defines muy a tono, Genín!!
EliminarBesitos y salud
A mi me encanta esa espuma tan blanca, parece merengue...mmmm...que delicia....
ResponderEliminarBesos.
jajaja si Cheli, un apetitoso merengue....
EliminarBesosss
Ay...la segunda foto es increíble!..y cómo me gusta todo eso que él dice...Bico
ResponderEliminarA mí tambien me encanta esa foto, Vera. Y el poema, delicioso.
EliminarBicos
Una maravilla, una maravilla. Dos maravillas.
ResponderEliminarjajaja Darío, un beso maravilloso
EliminarEsa es hambre. Maravillosa.
ResponderEliminarUn hambre que alimenta.
EliminarUn abrazo, María Jesús.
Liviano, fresco, pícaras las letras del poema. El hambre, la sed...un desayuno así, aumenta el deseo.Un beso
ResponderEliminarUn manjar para saborear, Fio
ResponderEliminarun beso, uruguaya