martes, 16 de junio de 2015

Firme en sus raíces.


Cuenta una leyenda del lugar, que en la orilla, entre el mar profundo y la arena y como siempre en bajamar,  puedes observar cómo su cuerpo, desnudo ya por tanto oleaje sufrido pero aún esbelto y altivo, se eleva sobre la inmensidad del mar para otear el horizonte por si decide regresar.  Y cómo, con cada nueva pleamar vuelve a quedar sumergido, pero siempre firme en sus raíces para volverse de nuevo a elevar.

14 comentarios:

  1. Curioso este árbol en el mar, muy curioso.
    La leyenda de lo que lo has rodeado es preciosa.
    Un beso, Carmela.

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    1. Curioso, verdad?, pues ahí estaba :)
      Tiene toda la "pinta" de estar ahí por un por qué muy especial, no?, jajajaja me gustó pensar que esperara a alguien.
      Un beso, Isabel

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  2. La madre naturaleza nos trae esas maravillas... besos

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  3. Bonita fotografía, y no sólo del árbol, Carmela. Con esa belleza y gusto con que captas las cosas de la vida. En este caso además con leyenda incluida.

    Un gran abrazo.

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    1. Gracias Ernesto, por tus palabras y me alegra que te guste :)
      Un abrazo

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  4. Y así toda la eternidad.
    Es poético.

    Besos.

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  5. Me gusta este maravilloso poema fotográfico con toda su exquisita naturalidad.
    Besos!

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