jueves, 5 de noviembre de 2015

Entrar al mundo cada día.





Y porque no es posible otra cosa
y porque no hay regreso,
y es así
y está bien:
paisajes en blanco siempre delante.
Y aunque no se pueda elegir dónde ni cuando,
entrar al mundo cada día
con la única decisión de crear el lugar donde ser
y al que llegues.

Y entre vueltas y vueltas de aire
buscar cada día nuevos lenguajes
que sin palabras nos hablen
y reunir sólo aquellos  detalles
que podamos llevar en la memoria
y seguir siempre el ritmo de nuestro instinto
y convertir, la suma de casualidades que nos conforman,
en el resplandor de lo que somos.

Y ser el lugar al que llegues.
Y ser el lugar en el que seamos un solo cuerpo envolviéndonos.

22 comentarios:

  1. Lo malo es que nos damos cuenta de que fueron casualidades cuando ya han pasado :)
    Besos y salud

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  2. Detalles, sí, eso es lo que al final llena.
    ¿Qué es ese sitio tan curioso?
    Besos, Carmela.

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    1. A fin de cuentas, lo importante cabe en la memoria, lo demás sobra.
      Como dice María Jesús, es el reflejo en la pantalla de luz de una habitación :)
      Besos, Blue.

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    2. Jajaja, ahora lo veo claramente, pero antes lo vi en negativo y me pareció una especie de sala rara o museo, por eso te pregunté.
      En fin, esas cosas del cerebro. Igual me lo tengo que analizar.

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  3. Creo que ese sitio tan curioso es el otro lado de la habitación, con su puerta, vista a traves de la pantalla de la luz. El efecto es increíble.

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  4. Las casualidades mucha veces nos llevan a lugares muy interesantes. Excelente imagen !! besos

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    1. Así lo creo, Abril.
      Te mando un abrazo enorme, y cuídate !!

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  5. Hola Carmela!!

    Y entramos en él, y nos habituamos también a todo lo que nos pone alrededor, en el camino o entre los pies, pero es que el mundo nos espera a diario y no tenemos excusa posible para no estar ahí.

    Me encanta la imagen.

    Besitos

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    1. Hola, FG!!, así es, a diario y de frente, y a sumergirnos con toda nuestra fuerza.
      Un abrazo!!

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  6. Una gozada de imagen... misteriosa y resplandeciente. Curiosa.

    Y sí, entrar cada día al mundo. No queda otro remedio así que habrá que poner empeño y un poco de gusto.

    Besos y blanco

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    1. Empeño y ganas, y de paso esos amores que tu ya sabes :) que hay tiempo para todo, no?
      Besos, muchos, Marga.

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  7. Hola Carmela.

    No sólo imagen, sino también profundidad en las palabras. Expresión toda, al fin y al cabo.

    ...sin palabras… en la memoria… nuestro instinto… envolviéndonos.

    ¡Guía!

    Un gran abrazo, amiga.

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    1. Hola Ernesto, que alegría verte de nuevo por aquí. Y perdona el retraso en contestar, pero paso por un tiempo, sin tiempo, que espero ir recuperando y tambien volver a pasar por los blog amigos como el tuyo.
      Gracias por tus palabras, siempre amigas.
      Un gran abrazo.

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  8. Y ser el lugar al que llegues...
    Qué evocador todo. Y acertado.
    La casualidad, sí, y tanto.
    Me va que ni pintado.

    Me encantas!

    Un abrazo!

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    1. Hola!!! que alegría verte por aquí, de verdad. Y qué mejor que ser el lugar de alguien, y que a la vez ese sea nuestro propio lugar. La casualidad, las casualidades, son, ocurren y nos rodean y de ellas surgimos y somos, no?. Y la casualidad me llevó en un momento a tu casa, te acuerdas? y fíjate lo que me cambió, ni tú misma lo sabes, pero fue, ocurrió y bueno, la aprovechamos y nos cambian, nos hacen o la hacemos nuestra, al fin es lo que cuenta, hacerlas nuestra.
      Un beso grande!!

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  9. me encanta la pureza de sentimientos
    que te envuelven cuando escribes tu verso

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  10. Entrar y salir del mundo, hacer de el un lugar para estar, para poder irse también. La foto me atrapó cuando la ví, Lhasa también. Un beso

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