Casa rural, en la Sierra de Grazalema, Junio-2020
Norah Jones - Easy Living
Aire que crece siendo viento
entre ramas que acarician
en mi piel tus besos.
Llegaste un día claro
como un río lleno de peces.
Supiste llegar al centro de mi deseo
fluir en silencio
creando tu propio espacio,
ese que solo guardo para ti
y que espero que reclames
con la ferocidad
de quién sabe lo que es suyo.
Pienso que esta tarde
la luz cae más suave
como si quisiera alargar
su hora de acostarse
y se mueve muy despacio
bañándose en tu agua,
y oigo como el viento
susurra un poema
entre las hojas caídas.
Un bonito lugar donde la vida fluye , y la poesía crece feliz.
ResponderEliminarUn beso.
Si que es un lugar muy bonito, Amapola, donde es fácil aislarse de todo lo demás.
EliminarUn beso!
Los ríos y el viento escriben auténticas sinfonías de vida, poemas verdes de esperanza.
ResponderEliminar:))
Solo hay que dejarse fluir con el entorno y escuchar lo que nos dice.
EliminarUn beso!
ResponderEliminarFotos fascinantes con un hermoso poema.
Ilustración perfecta
Tenga un día feliz
Un paraíso fácil de retratar.
EliminarUn beso, Rycc@rdo!
es bueno reclamar los espacios propios con ferocidad.
ResponderEliminarsobre todo si son espacios para compartir.
que se acueste la tarde, que se libere el centro del deseo.
Un lugar propio, “en otro”, es un verdadero tesoro, guille, que no todo el mundo consigue. Y cuando se tiene, no hay otra, que reclamarlo con pasión y seguridad, sabiendo que la otra persona es lo que desea.
EliminarLa tarde prepara el encuentro...
Un beso, guille.
Bellas plabras que acompañan las fotos de un lugar de ensueño.
ResponderEliminarLo de la ferocidad lo he encontrado muy elocuente ;)
Besos.
Un lugar precioso, Alfred.
EliminarMejor no dar pie a dudas, no!!
Un beso.
Tiene la belleza del silencio. Un abrazo. Carflos
ResponderEliminarY esa belleza, la del silencio, es enorme.
EliminarUn abrazo, Carlos.
Un lugar precioso, y con imágenes muy buenas, como sueles regalarnos. Cuando llegan y de alguna forma llenan las tardes, las ramas de los árboles, el piar de los pájaros, es que reaniman el alma.
ResponderEliminarUn abrazo
En ese lugar, era fácil, sentir esa sensación de vida, y sentirse, una, con la naturaleza y, consigomisma. Qué más puede pedirse?
EliminarUn beso, Albada!
Un poema muy sensual. Me ha emocionado. Las imágenes como siempre de órdago. Muchos besos
ResponderEliminarMe alegra verte por aquí, Republicano, y que te guste lo que ves. En este lugar, uno puede ser “quien es” y sentirse en paz ( y creo que me entiendes)
EliminarUn beso!
Es un lugar precioso y tus versos lo engalanan... haciendo más fácil la vida. Me ha encantado, Carmela.
ResponderEliminarMil besitos para ti y feliz día ♥
Auro, un lugar muy hermoso que no necesita palabras, pero donde salen solas, las palabras.
EliminarUn beso grande!
Y aquel lugar luce ideal para un encuentro, dan ganas de pasear por allí, además acompañado de buena música.
ResponderEliminarBesos dulces y dulce semana Carmela.
Pasear y perderse en, él. En todo lo que abarca, “el”.
EliminarLa voz de Norah Jones se hace, una, con el murmullo del agua y el aire.
Un beso, Dulce.
Precioso paisaje y tu has sabido captar la esencia y plasmar con palabras los sentimientos, eres un hada bloguera. Abrazos
ResponderEliminarMe encanta lo de hada bloguera, no te lo voy a negar :))
EliminarUn lugar precioso, Ester.
Besos.
Tardes lentas del lento verano (Machado) por las que fluye fresca y lenta la vida. Paz, sosiego... qué gustito.
ResponderEliminarBss
Esa palabra, que me encanta, “gustito”, define la sensación, incluso mejor que el gran Machado.
EliminarVeo que tenemos un lenguaje parecido :))
Besos!
Así como tu mar forma parte ya de tu Adn, ahora este verdor destellante, esos arroyos,los árboles,nos sumergen en tu propio mundo interno.
ResponderEliminarEs bellísimo el poema,y las imágenes son para imaginarse en cualquiera de esos rincones.
Un beso enorme Carmela!
Sabes, Lunaroja, el mar, como bien dices forma parte de mí, al menos, así lo siento, pero entre estos verdes el alma se desnuda y se mira a sí misma.
EliminarMe alegra que te guste.
Besos!!
una delicia de lugar y de poema
ResponderEliminargracias por la información
besos
Gracias, Noel, y de nada, un placer y espero que disfrutes de Grazalema!!
EliminarBesos!
Qué bonita la Sª de Grazalema, un lugar en que la lluvia es la protagonista, no hay más que ver el verdor.
ResponderEliminarA ti te soentó bien, sólo hay que leer tus letras.
Sí que es preciosa, Tracy. Y sí, me sentó de maravilla :))
EliminarBesos!
El verso final, excelso, rubrica otro gran poema salido de tus más bellos puros sentimientos, Carmela.
ResponderEliminarAbrazo inmenso.
Me alegra que te guste, Carlos!!
EliminarUn abrazo grande!
No sé qué acompaña a qué, pero son una preciosidad tanto el poema como las fotos.
ResponderEliminarBesos.
Gracias, Chema!!
Eliminarun besazo.
Un hermoso lugar que recibe oxígeno perfecto. Acompañado de circuitos poéticos.
ResponderEliminarTenga un buen día.
Saludos desde Indonesia.
Hola Himawan, gracias por tus palabras.
EliminarUn beso!
Esos maravillosos verdes de tus fotografías preparan el alma para un poema precioso (¿¡cómo no!?), en el que la suavidad de la caricia del aire se combina con esa ferocidad deseable del amor apasionado. Para ser muy sincera, y dicho con cariño, siento mucha envidia de que puedas escribir tan bello y, sobre todo, sentir así. Envidia que no me impide desear que lo vivas eternamente.
ResponderEliminarBesitos, Carmela
Bueno, Alís, tú me miras con muy buenos ojos. El lugar desde luego se daba a sentir con fuerza, además de con suavidad, una combinación perfecta. Los sentimientos están, eso no te lo niego, vivirlo, ya es otra cosa :))
EliminarBesos muchos.
Que fotografías tan bonitas.
ResponderEliminarNo sé qué temperatura haría, pero transmiten fresco y calma, mucha calma.
Besos.
Me alegra que te gusten, Devoradora de libros. Estábamos a 32º, pero entre esas sombras se estaba de maravilla.
EliminarBesos!!
Precioso tu canto y las fotos me trasmiten tranquilidad, que bellas. Saludos amiga.
ResponderEliminarUn lugar precioso y es cierto lo que dices, donde se sentía una gran paz y tranquilidad!
EliminarUn besazo
Uffff mi verde favorito está siempre en la naturaleza, bonitas letras para acompañar estos preciosos rincones de "la vida".
ResponderEliminarBesines utópicos.-
Un verde lugar, precioso, Irma!
EliminarBesitos.
El viento susurrando poemas... ahí me quedé.
ResponderEliminarMe encanta.
:)
Bienvenido a ese lugar, Toro.
Eliminar:))
Besos.
Precioso lugar para volverse a encontrar! Todas las fotos son una maravilla con ese verde esperanza.
ResponderEliminarBesitos
El lugar indicado...
EliminarBesitos.
Un poema para releer y un paisaje para robar.
ResponderEliminarLas fotos son maravillosas y no me extraña que las tardes se alarguen y los poemas nazcan.
Besos.
Gracias, Juan, realmente era un lugar maravilloso.
EliminarBesos!
Lugar ideal para pasear. Incluso para perderse. (yo lo estoy últimamente) y paso a dejarte muchos besos y todo mi cariño.
ResponderEliminarUn lugar precioso, Laura. Sí, me he dado cuenta al volver, espero que te vayas encontrando y te encuentres bien.
EliminarBesos y mis cariños grandes!
Reclama que vaya a tu encuentro, pero no olvides firmar el recibí.
ResponderEliminarMaravilloso lugar, preciosos versos.
Un beso.
jajaja lo recordaré, Ilduara.
EliminarGracias.
Beso grande.
Todavía en ambientes rústicos de verde de floresta enmarañada...
ResponderEliminarPoético título para el consiguiente poema. ¡Así eres tú! Sea a la orilla del mar o entre rústicos verdes de floresta enmarañada...
Fuerte abrazo Carmela.
jajjajajaaja... ¡Vaya, se me ha enmarañado el comentario!
ResponderEliminarEspero sabrás desentrañarlo!
jajajaja Ernesto, completamente desenmarañado, gracias!!
EliminarFuerte abrazo!
Naturaleza a raudales que inspiran versos igual de relajantes.Preciosa entrada Carmela.
ResponderEliminarAbrazo
Un lugar, como bien dices, rebosante de naturaleza y paz, Joaquín. Gracias.
EliminarUn abrazo!
Precioso lugar como tus poesías. Besos Carmela.
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