In Memory of a Dream, Ludovico Einaudi
Paso de puntillas por ese silencio que callas y que, sin tu saberlo, se lee perfectamente sobre tu piel, porque has de saber que, aquello que siempre soñamos, se vuelve sombra, amiga y perenne, de nuestros propios pasos. Y es ahí, donde de verdad te encuentro, en ese lugar, a pesar de tu intento de vivir en el otro lado. Hasta que un día veas, que la luz no apaga el resplandor de los sueños, y que es maravilloso tener un lugar donde guardar lo soñado. Un lugar donde poder volver siempre, con los cabellos al viento, mirando al horizonte y respirando el alba.
Y comprobarás que es, en ese lugar que te crece mar en el mismo borde de tus ojos, donde la vida realmente emerge y nos salva.