lunes, 31 de enero de 2011
Me pase del colorao
De repente, un día cualquiera, de imprevisto, cuándo ya no lo esperas y cuándo aún intentas comprender todo lo ocurrido, aparece de nuevo en tu vida y con un simple acto, ejecutado como siempre con maestría, comprendes en un simple pero eterno segundo toda la verdad, y ves que todo era una burda mentira, que solo has sido un instrumento mas para alcanzar lo que quería; y también en ese mismo momento comprendes que esas acusaciones que has llevado como una lápida desde entonces, eran simplemente una manera para salir de todo aquello, y que la tan nombrada verdad, la verdad declarada como baluarte, como símbolo de su vida y restregada con escarnio por tu cara, no era mas que una ridícula pantomima de esa palabra. Y te tienes que parar, y respirar, respirar fuerte, con ansia, intentando desesperadamente que algo te vuelva al cuerpo y te haga salir de esa nada, fría y oscura, en la que has entrado.
(Toni Zenet: Yo que un día te quise siempre)
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Yo ya he llegado a la conclusión de que aquel que me viene abanderando una verdad absoluta e inflexible,lo que trae es un colgajo que es harapo frente a otro colgajo harapo de otro y otro colgajo harapo de otro...y así sucesivamente...
ResponderEliminarAchuchones...anúdate bien el fular para no coger frío...y cabeza erguida ;)
Como dice India, abrigate bien abrigada y salí a tomar aire y soltar lápidas que otros te hayan puesto.Un beso
ResponderEliminar¿A ti también te pasa que a veces te falta el aire?
ResponderEliminarQue entrada más misteriosa.
Besos.
India, tres vueltas le tengo dado al fular. Creo que como le dé otra, me ahogo y desde luego no se lo llevará el viento.
ResponderEliminarBesos de verdad!!
Un paseo frente al mar Fiorella, siempre me gusta. Cualquier excusa es buena.
ResponderEliminarBesos abrigados
Y eso que en Cádiz no falta precisamente el viento.
ResponderEliminarToda la vida es un misterio Blue, pero me encantan los misterios. La monotonía me aburre.
Un beso misterioso.
Carmela, estás criptica y yo un poco espeso pero atino a descubrir una deccepción de esas que son como una bofetada que te vuelven la cara del revés de golpe sin esperarlo o quizás sin querer verlo con tiempo y que dejan en la nada sin saber por dondeempezar de nuevo.
ResponderEliminarUn beso de colores.
Pues paramos, respiramos hasta que el aire llegue a cada rinconcito y volvemos a la lucha de cada dia.
ResponderEliminarBesos aireados
Wendy tú no estás espesa nunca, yo creo que la protagonista de la entrada es la única que sabe a qué se refiere, pero me da a mi que el fular lo lleva para que no se le caiga la cara de tantas vueltas que le ha dado esa bofetada.
ResponderEliminarBesos claros.
Lluna ya te echaba de menos, ¿que tal tu finde?.
ResponderEliminarInspirar, espirar, inspirar, espirara....menudas expertas estamos en eso, verdad?
Beso de bienvenida.
Quién no ha sufrido decepciones cómo éstas en la vida? ahhhh, lo mejor del tiempo es que todo lo cura y al final la verdad respira libre. Respira, que todo vuelve en la vida y uno aprende, a los golpes a veces, pero aprende.
ResponderEliminarQue el que no sea capaz de amarnos, él se lo pierde.
Maia!! que de tiempo. Al menos te veo por Argentina. Está claro que el tiempo lo cura todo, o casi todo. Y también que el amor existe o no, nunca pede exigirse, pero ella se refiere a una decepción mas grande, y mas dificíl de curar: la verdad o mas bién a su ausencia.
ResponderEliminarBeso grande.
El viento suele cambiar, del sur suele venir cálido y en invierno se agradece, del norte suele venir fresco y en verano se agradece. Otras veces viene cambiado.
ResponderEliminarHola Leovi, me agrada verte por aquí. Veo que eres un experto en vientos. Eso es bueno. Supongo que cuando cambian pueden producirse remolinos que incluso lleguen a ser tornados. Por aquí debió pasar uno.
ResponderEliminarSaludos ventosos.
Carmelation, los textos alusivos y metafóricos, trampas enredosas son donde los comentaristas naufragan, oh, como también ocurre en las entradas de cierta gallega azulada.
ResponderEliminarPara salir del agua, diré que me parece la descripción de un ataque de cuernos de la prota supuesta. O eso, o la relegación a segundona de la amante, en beneficio de la mujer legal.
Todo ello es posible, oooh, en el ancho y vasto mundo. Que el fular sea con nosotros.
(Aunque escriba así, soy normalillo y tal) Besos.
A veces me olvido que solo son fragmentos de una Historia no Contada y dificíl de leer como un solo fragmento.
ResponderEliminarEn este caso no has dado una.Pero como dices todo es posible.....
Me gusta como escribes, normalillo!!
Eso,eso...carmela,tú síguele el rollo con lo de normalillo,lo que él diga...sí,sí,mejor...jaaaaajajaja que éste está como una regaera jaaaaaaaaajajaja
ResponderEliminarIndia, shhhhhhhhhhh, es que es muy tierno y no iba a decirle a secas que no ha dado ni una. Así entre algodones no lo altero.....tanto.
ResponderEliminarIndia, lo he leído, que lo sepassss. Este finde ya no entras al Club Náutico...
ResponderEliminar(Besos, Carmela)
Supongo, querida Carmela, que una mentira sólo se revela como mentira a la luz de una nueva verdad que, poniéndose en su lugar, desecha esa presunta verdad previa al desenmascararla como falsa. Por desgracia, la verdad puede tardar mucho tiempo en emerger e incluso no emerger nunca. Así que, aunque algunas verdades sean sumamente dolorosas, creo que la protagonista de tu relato ha tenido mucha suerte al llegar finalmente a descubrirla. Y es que la verdad nos hace libres. Libres por iluminar la situación en la que nos encontramos, y que antes se nos ocultaba por causa de la mentira. Libres para actuar en consecuencia con ella y con las posibilidades reales que a partir de su iluminación se nos abren.
ResponderEliminarLa nada es fría y oscura. Pero es un perfecto punto de partida. Precisamente porque nos lanza en busca de cosas cálidas con las que llenarla. Porque no soportamos durante mucho tiempo habitar en esa nada y no hay mejor motor que la urgencia por ahuyentarla.
Un beso!
Como siempre querida Antígona eres certera con tus palabras, y si, tienes toda la razón en que por mucho que una verdad duela siempre es mejor la luz que irradia, a vivir bajo la oscuridad, aparéntemente cálida de una mentira. El golpe al salir de esa aparente calidez nos desconcierta e intentamos negar la luz, pero tenemos dos opciones, podemos rendirnos y buscar refugio, equivocadamente, bajo las piedras o reaccionar y buscar a la luz del día la verdadera calidez de la verdad.
ResponderEliminarBesos calidos!!