Insistes en amanecer en ninguna cama. Y
sin almohada. Los labios apoyados en el silencio y dibujando con tus
dedos líneas cerradas en el polvo. Bajando persianas, cerrando
aldabas y ahuyentando a manotazos la luz que intenta entrar por
las rendijas. Pero dentro, fuera, en medio o quizás en alguna
esquina, chocarás de frente con ella. Cuerpo a cuerpo, cara a
cara, o quien sabe, beso a beso. Y entonces, y si dejas que su
aliento moje tu cara, sacuda tu cuerpo o sus labios apenas te
rocen, sacudirás el polvo oxidado que anclan tus pies. Y
cruzarás la puerta que lleva a quién sabe dónde y quién sabe como. Y
darás con el sol, la luna, las flores y también el viento, la lluvia y las
tormentas. Pero en el fondo sabes, porque lo sabes y no puedes
engañarte, que a fin de cuentas así es la vida y que merece la
pena vivirla, cruzarla, zambullirse de lleno en ella y
encararla. Buscar la luz, el olor a avena y el color ardiente
sobre la arena. Buscar sus notas, sus acordes, su mejor
sinfonía y tocarla. Tocar la vida. Tocarla por todas partes. Por
arriba, por abajo, desde fuera y desde dentro. Estrujarla, achucharla, abrazarla y
sobre todo y siempre, tenerla de almohada en tu cama.
...sentirla
ResponderEliminarAntes, durante, después... De buscar y encontrar esa luz.
Dormir abrazado a ella y despertar para vivirla.
Un abrazo.. De luz✴
Reposar cada noche sobre ella, soñarla, ensoñarla, desearla y vivirla.
EliminarAbrazo de ola.
Bellisimo....
ResponderEliminarGracias, Demian.
EliminarUn abrazo.
Tus palabras son un reconstituyente vital.
ResponderEliminarBesos.
Si te lo parecen, me alegra, y mucho.
EliminarBesos, Toro.
Siempre merece la pena vivir la vida con los cinco sentidos, tal y como tú lo haces y lo reflejas en estas entradas preciosas.
ResponderEliminarUn beso, Carmela.
Eso creo yo, Isabel, vivirla a tope y con esos cinco sentidos. Lo demás....ya lo pone la vida.
EliminarBesos muchos.
Entre la hoja y tus palabras ya me llevo las pilas puestas... ea.
ResponderEliminarBesote!
Me encanta sentirme Duracel, jajajaja es broma ñora. Ea, pues a cargarse.
EliminarBesos de conejito encantado.
La vida como almohada es precioso...
ResponderEliminarUn lugar, nuestro lugar, donde reposar y soñar, y cada día vivirla.
EliminarUn abrazo, María Jesús.
Preciosa nómade...
ResponderEliminar:))
EliminarUn abrazo, Darío.
Así debería ser siempre la vida.
ResponderEliminarBesos, Carmela.
Debería y debiéramos...
EliminarBicos, Blue.