Y aquí estoy de nuevo
las paces hechas conmigo misma,
con la misma vida, contigo.
La furia, el arrebato, la negación de tu belleza de tu vida de
tu fuerza,
cuando veo como esa misma vida resbala entre sus dedos, gota a
gota, ya sé que no es la solución.
Aceptar que la vida sigue, que cada día nuevas olas bañan tu
arena, que no se puede negar la belleza aunque el dolor nos inunde por dentro,
me cuesta no voy a negarlo, pero sé que es así y sentir de nuevo la caricia de
tu luz, la frescura de tu aroma, la vida que emanas, la delicia de tu agua, me
reconforta.
Perderme en tu horizonte y encontrarme,
abstraerme con tus olas, con su belleza
y sentir de nuevo la magia que siempre me engancha,
me envuelve,
me contiene y me abraza.
Sentir, respirar, aspirarte y llenarme de vida,
de la vida, que hoy es y mañana no,
pero que es vida viva.
Luz, agua y vida que siempre me atrapa,
aunque lleve mi propia marea por dentro.
Que hermosas tus fotografias. Que hermosas tus letras que la acompañan. Juntas hacen un hermoso Mar de letras. Beso
ResponderEliminarUn reencuentro con el mar, con la mar, cuando he conseguido aceptar ciertas cosas, Demian. Un reencuentro necesario y reconfortante.
EliminarUn beso.
Fotos+texto= una maravilla :)
ResponderEliminarBesos y salud
Gracias Genín, me alegra que te guste.
EliminarBesos y salud.
Que ese mar te abrace siempre.
ResponderEliminarQue lama y cure tu herida.
Un abrazo.
Gracias, Toro, ojalá sea así.
EliminarUn beso.
Yo lo necesitaría y lo tengo lejos. Eres afortunada, Carmela.
ResponderEliminarMe encantan fotos y texto, una vez más.
Besos
Sé que lo soy, Celia, y me da mucho.
EliminarEspero que al menos verlo, te refresque.
Gracias y un beso.
el mar tan tuyo
ResponderEliminarla mar tanta poesía
fuente de vida sin genero ni numero
infinito horizonte que nos abriga y nos acoge
que dibuja rumor de caracolas
curando heridas escucha anhelos y penas
somos agua, somos sal ... somo mar
Y esa inmensidad que regalas ....... como para irse y no volver
un abrazo :-) salada ¡¡¡
Gracias, María, tus palabras son preciosas, toda una marea de luz y sal :)
EliminarUn abrazo grande!!
Espero que disfrutaras :))
Hay que asirse a lo que nos sostiene, Carmela, no queda otra.
ResponderEliminarLirismo, tanto en tus magníficas fotografías como en tus palabras.
Un grandísimo abrazo, pero grande, muy, muy grande.
Y el mar me sostiene, Isabel y a él he vuelto, cuando he asimilado. Todo lleva su tiempo, pero como bien dices hay que asirse a lo que nos sostiene.
EliminarTambién yo te mando un abrazo enorme, enorme, y gracias.
Carmela, el mar cuando estoy cerca de él me alegra la vida, pero por desgracia esta muy lejos de mí. Gracias, por esas fotografías tan lindas.
ResponderEliminarVerdad que alegra, Teresa, a mí no sabes cuanto. Espero que te llegue un poquito de este mar.
EliminarMuchos besos.
Que tu marea sea generosa contigo y te haga feliz.
ResponderEliminarGracias Ilduara. De momento me conformo con recobrar la serenidad.
EliminarSerá porque soy de tierra adentro pero el mar me atrae me relaja. Igual que una hoguera en la chimenea. Puedo quedarme mirándolo horas. Me gustan esas olas calmas.
ResponderEliminarSalu2
A mí me relaja mucho, Juan Carlos y como a ti, tambien me atrae y me hipnotiza, las llamas de una hoguera en una chimenea.
EliminarUn beso.
Hermosas palabras y fotografías.
ResponderEliminarSaludos
Gracias.
EliminarSaludos