En la estación del frío, aquella de la que no se vuelve o al menos es lo que dicen, todos los vientos aúllan a un mismo tiempo desbaratando los días y rasgando las noches; pero a pesar de ello, y sobre el rumor de las olas, titilan las gotas vibrando sobre la espuma -o quizás sea yo la única que las escuche-. Y su jadeo tibio y calmo -a pesar del frío, a pesar del ruido- me sorprende a mí misma con tanta ferocidad que me adentra en esos instantes eternos -cazadores de sueños- donde el aliento se demora creando pequeños intersticios -círculos dentro de otros círculos- donde el asombro aun cabe. Y es ahí, con la sed en mi mirada, desde donde invoco el aroma que se esconde varado en la piel, justo donde el vaho del deseo exhalado dibuja esas constelaciones que me son tan cercanas, tan palpables, tan fiables, y me dejo estar -segura y confiada- lo que dura un viaje de sueños rozando orillas, hasta que mis ojos sean de nuevo agua, desde donde sea posible reescribir la vida y navegar en el asombro.
Me alegro de tu vuelta , de tus versos y de esa fotaza.
ResponderEliminarY a mí me alegra saber que te alegra :))
EliminarHermoso poema en el que se puede descansar sobre la dulzura de las olas cuando sus gotas resultan espumas de oro, Carmela.
ResponderEliminarTe estaba extrañando.
Gracias Tecla. Es cálido sentirse extrañada :))
EliminarUn beso
So much passion in your posts.
ResponderEliminarxo
Gracias Rick.
EliminarUn beso!!
:)
ResponderEliminarBesos y salud
Muchos besos Genín y salud!!
EliminarCazadores de sueños, piel de sal. Infinito el paisaje de una ola austral...Siempre es posible reescribir la vida. Mientras tengamos la tinta de sal, sacudiendonos en las venas. Besito me legra hayas escrito Carmela :)
ResponderEliminarEs cierto Demían, por suerte, siempre tenemos la capacidad de reescribirnos, solo que a veces pesa, pero como bien dices, mientras nos quede la tinta de sal...
EliminarY a mí me alegra que a ti te alegra.
Un abrazo.
Con estos calores parace como si el frío fuera algo inventado por escritores de mentes calenturientas.
ResponderEliminarGracias por tus letras y tus imágenes.
Besos.
Aquí hoy cae todo el fuego de San Juan :))
EliminarGracias a ti, Macondo.
Un beso.
Siempre llegan primaveras que nos rescatan
ResponderEliminarinstantes que no se miden en tiempo , si no en sensaciones
entonces el frío del invierno desaparece
por arte de magia , se instala la luz en la mirada
y si la retina se humedece es de emoción y felicidad
y una se queda adormecida en la calidez de un suspiro
de una mano, de una mirada, de una caricia que nos salva
del invierno
precioso lo que has escrito y como no tu foto es genial
un abrazo Carmela :-)
Precioso es lo que has escrito tú, María.
EliminarVivimos entre primaveras e inviernos, entre ellos nos movemos :))
Un abrazo desde esta orilla a la tuya!!
¡ Pero que bonito ! Una vuelta preciosa. Un abrazo.
ResponderEliminarY tú siempre aquí :))
EliminarUn abrazo grande.
Espero que estés bien.
ResponderEliminarParece un poema de reafirmación.
Besos.
Gracias Toro, por tus deseos. Ahí estamos, entre inviernos y primaveras.
EliminarUn abrazo grande.
La estación fría se aleja con la pasión del deseo exhalado. Nadie espera ni piensa en la muerte en fases de efervescencia amorosa, el tiempo adquiere otro ritmo, dilatamos los segundos y apenas nada cuenta más allá del amor.
ResponderEliminarMaravilloso poema, me hace navegar en el asombro y pone palabras a mis sentimientos.
Me alegro de tu vuelta.
Un beso.
Como siempre, precioso lo que escribes Ilduara. Suspiremos y exhalemos fuerte :))
EliminarNunca deberíamos abandonar el asombro, al menos para mí es vital. Sin él, me ahogo.
Yo tambien me alegro de verte, Ilduara.
Besos.
Volver a escribir la vida...seguir sorprendiéndose...que así sea.
ResponderEliminarEmpezabas hablando de invierno pero ese mar tiene un cálido tono dorado...será una señal?
; )
Me gustó mucho.Todo.
Un besazo.
Que así sea siempre Carmen, reescribir día a día navegando en el asombro!
EliminarMe alegra que te guste. :))
Otro besazo.
Como un sueño es tu poema... visualizar y escuchar cada gota... cada gemido del viento.
ResponderEliminarBellísimo, preciosa.
Mil besitos, Carmela.
Un sueño que en nosotras está realizarlo o no. Buscar ese asombro que nos mantenga viva.
EliminarMuchos besos.
Me encanta tu poema Carmela, habla de caos, pero habla de espacios de luz,espacios donde uno reencuentra esa esencia a pesar de todo.. Precioso poema! Me ha gustado muchísimo! UN besazo!
ResponderEliminarGracias Lunaroja. Busquemos esos resquicios...
Eliminar:))
Besitos muchos.
La imagen atrapa, mece entre las comisuras de sus batallas.
ResponderEliminarY tus palabras son las pasos de quien camina por la orilla pensando y hablando para sí misma, pero a la vez sabe que el mundo escucha su lírica.
Te dejo mi abrazo de luz ☆ 🌾🌼
Esta imagen es especial para mí, Athenea y me agrada que te guste. No sé si el mundo escucha o no, de verdad, pero en realidad, creo, que quien debe escuchar-se, es una misma :))
EliminarUn abrazo, siempre.
Navegando en el asombro, buen final para un bello poema.
ResponderEliminarUn beso Carmela ay
¿Te apuntas?
Eliminar:)
Otro beso ay
La vida es un deambular de estaciones, una te lleva a otra, como el día te lleva al anochecer… o la luna, al amanecer… Y nosotros, somos transeúntes con mochilas a cuestas… pero siempre dispuestos a caminar, a respirar y abrazar un nuevo día, a escribir o reescribir nuevas páginas de ese libro que es la historia de nuestra vida…
ResponderEliminarQué bien volver a leerte, mi preciosa amiga… Vuelves con fuerza e intensidad… Precioso… y la imagen, divina!!
Bsoss y cariños enormes!! 😘
Lo dices de una forma muy bonita, Ginebra :)
EliminarYo tambien me alegro de volver, aunque sea un poco intermitente.
Muchos besos y mis cariños!!
Círculos dentro de otros círculos donde aún cabe el asombro, quisiera volver a tener eso aunque sea una última vez en mi vida antes de morir, invierno o primavera persigues a la vida y eso es increíble.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo, tus imágenes me consuelan.
JK
Esos círculos existen, no lo dudes JK y son los oasis en el desierto de la vida, aunque a veces cueste verlos. No concibo la vida sin ellos. Vivir sin la expectativa de asombrarnos, no es vida. Y tambien estoy convencida de que la vida no va a perseguirnos, es al contrario.
EliminarMe alegra saber que te sirven las imágenes, ves?, para mí eso es un aliciente, algo que me empuja.
Un abrazo y un beso.
Carmela
De la estación del frío se vuelve, pero nunca de la misma forma, es como si la propia piel ya no fuera eso sino corteza seca de árbol, y habrá de pasar tiempo, mares y calor para ir devolviéndole una textura y un color más suaves...
ResponderEliminarMe alegro de que escribas y, como las olas, vuelvas ;)
Un abrazo grande.
Hola Maquinista!!, y totalmente de acuerdo, no se vuelve igual!! Habrá que perseguir esa nueva piel que nos envuelva :)
EliminarY yo me alegro de que te alegres.
Un abrazo de ola grande.
Precioso, siempre lo bordas, tanto en el escrito como en tus magnificas fotos.
ResponderEliminarBesos.
Hola Rafa, me alegra verte. Y gracias.
EliminarUn beso!!
Tu orilla es una preciosidad.
ResponderEliminarBesos.
Gracias Amapola :))
EliminarBesos.