No encuentro mejores
palabras para describir el extraordinario poemario de Isabel, que las que ella
misma dejó en su entrada El nervio de la piedra que os pongo a continuación de estas palabras. Creo que sus palabras resumen
perfectamente la sensación que se siente al ir leyendo los poemas, que sin duda
van dibujando letra a letra, palabra a palabra, el Nervio de la piedra.
Os dejo, dos de los poemas
que más me han llegado, aunque todos, sin lugar a dudas, tocan un algo que
reconocemos en nuestro interior.
El nervio de la piedra, un
poemario para almas valientes que estén dispuestas a hacer conmigo una bajada a
los infiernos. Eso sí, después nos alzaremos para alcanzar el cielo más
brillante. Los humanos somos duales: sombra y luz, canto y lamento, risa y
llanto. Quizá no haya vehículo más adecuado que la palabra poética para dejar
constancia de lo que nos aflige y nos cuesta nombrar. Solo el misterio de la
poesía conoce bien las arrugas del espíritu. Pero la catarsis siempre se opera
con la escritura, de ahí que sea la propia palabra la que busca cauces de
salvación y nos rescata de las simas que amenazan con devorarnos.
Vía oculta
Afirmo que hay caminos
quebrados
en las noches insumisas,
senderos vulnerables en las sombras
que conducen hacia el nervio de la
piedra.
Antes hubo un tiempo para el
suspiro,
otro para el poema y otro más para
la música.
Eran tiempos que se enlazaban,
con el generoso pasar de sus
minutos,
en la contemplación de la vida,
en el futuro que se abría
y nos aguardaba con toda la
felicidad
que, luego, se nos negó.
Fugacidad
Pedimos
a la ola el reposo perenne
junto
a nuestra orilla,
un
blanco sosiego sin resaca estéril.
Pero
ella no tiene cobijo ni conoce las pausas.
No
se debe pedir imposibles
a
lo que llega para amarnos un instante.
¡Menudo alegrón nada más empezar el día!
ResponderEliminarMuchísimas gracias por este detalle, querida Carmela. Estar aquí con un par de poemas, en este blog maravilloso, con dos magníficas fotografías, es un auténtico lujo. Eres un encanto.
Un abrazo grandísimo.
Me alegra muchísimo que te haya gustado la entrada, para mí si es un lujo que esten tus poemas en mi casa, y ha sido un verdadero placer viajar a través de tus poemas por el Nervio de la piedra.
EliminarY ya sabes que tengo otro entre las manos, así que en cualquier momento cae otra entrada....
Un beso y un abrazo !!!
Es la quinta vez que escribo un comentario en tu blog y no se me graba :(
ResponderEliminarEra un mensaje larguito, para ambas. Isa, mucho éxito, muchas felicidades. Carmi, besos.
jo, Maia :(( pero mira que eres floja, jajajaja el mensaje larguito como que no lo repetiste, no? jajajaja
EliminarBesos para ti.
Voy a verlo.
ResponderEliminarLas fotos... una pasada.
Besos.
Gracias Toro, me alegra que te gusten las fotos, y si...míralo que merece la pena.
EliminarBesos
Desde luego el poema anticipa un gran libro.
ResponderEliminarBesos.
Es un gran libro, Toro, y creo que te gustarán todos los poemas.
EliminarMás besos!!
Vas a conseguir que me guste la poesía, Isabel.
ResponderEliminarHola Ximens, :)
EliminarElla es tan simple, pero tan rotundo. La amo. Un abrazo.
ResponderEliminarSus palabras son directas y llegan dentro, muy dentro, Darío.
EliminarUn abrazo.
Una delicia, exquisitas transparencias, me gusta especialmente la primera!
ResponderEliminarBesos!
Gracias, Leovi, me alegra que te gusten.
EliminarUn beso.
Es una alegría tener una vocación y poder desarrollarla. La verdad es que Isabel está imparable. Me alegro mucho porque, además, me parece muy buena persona.
ResponderEliminarBesos, Carmela.
Es cierto, Blue, Isabel ha cogido carrerilla :) y sí, es una gran persona.
EliminarBesos y bicos!!
Poesía contundente e imágenes perfectas. Isabel, dice y como...Carmela ve y dispara su mirada. Un beso para ambas.
ResponderEliminarDice, y de una manera perfecta :)
EliminarBesos para ti, uruguaya.