Y porque no es posible otra cosa
y porque no hay regreso,
y es así
y está bien:
paisajes en blanco
siempre delante.
Y aunque no se pueda elegir dónde ni cuando,
entrar al mundo cada día
con la única decisión de
crear el lugar donde ser
y al que llegues.
Y entre vueltas y vueltas
de aire
buscar cada día nuevos
lenguajes
que sin palabras nos
hablen
y reunir sólo aquellos detalles
que podamos llevar en la
memoria
y seguir siempre el ritmo de nuestro instinto
y convertir, la suma de
casualidades que nos conforman,
en el resplandor de lo
que somos.
Y ser el lugar al que
llegues.
Y ser el lugar en el que seamos un solo cuerpo envolviéndonos.
Lo malo es que nos damos cuenta de que fueron casualidades cuando ya han pasado :)
ResponderEliminarBesos y salud
Tenemos que estar atentos!! :)
EliminarBesos y salud, Genín.
Detalles, sí, eso es lo que al final llena.
ResponderEliminar¿Qué es ese sitio tan curioso?
Besos, Carmela.
A fin de cuentas, lo importante cabe en la memoria, lo demás sobra.
EliminarComo dice María Jesús, es el reflejo en la pantalla de luz de una habitación :)
Besos, Blue.
Jajaja, ahora lo veo claramente, pero antes lo vi en negativo y me pareció una especie de sala rara o museo, por eso te pregunté.
EliminarEn fin, esas cosas del cerebro. Igual me lo tengo que analizar.
Creo que ese sitio tan curioso es el otro lado de la habitación, con su puerta, vista a traves de la pantalla de la luz. El efecto es increíble.
ResponderEliminarAcertaste, galleguiña.
EliminarUn beso.
Las casualidades mucha veces nos llevan a lugares muy interesantes. Excelente imagen !! besos
ResponderEliminarAsí lo creo, Abril.
EliminarTe mando un abrazo enorme, y cuídate !!
Hola Carmela!!
ResponderEliminarY entramos en él, y nos habituamos también a todo lo que nos pone alrededor, en el camino o entre los pies, pero es que el mundo nos espera a diario y no tenemos excusa posible para no estar ahí.
Me encanta la imagen.
Besitos
Hola, FG!!, así es, a diario y de frente, y a sumergirnos con toda nuestra fuerza.
EliminarUn abrazo!!
Una gozada de imagen... misteriosa y resplandeciente. Curiosa.
ResponderEliminarY sí, entrar cada día al mundo. No queda otro remedio así que habrá que poner empeño y un poco de gusto.
Besos y blanco
Empeño y ganas, y de paso esos amores que tu ya sabes :) que hay tiempo para todo, no?
EliminarBesos, muchos, Marga.
Hola Carmela.
ResponderEliminarNo sólo imagen, sino también profundidad en las palabras. Expresión toda, al fin y al cabo.
...sin palabras… en la memoria… nuestro instinto… envolviéndonos.
¡Guía!
Un gran abrazo, amiga.
Hola Ernesto, que alegría verte de nuevo por aquí. Y perdona el retraso en contestar, pero paso por un tiempo, sin tiempo, que espero ir recuperando y tambien volver a pasar por los blog amigos como el tuyo.
EliminarGracias por tus palabras, siempre amigas.
Un gran abrazo.
Y ser el lugar al que llegues...
ResponderEliminarQué evocador todo. Y acertado.
La casualidad, sí, y tanto.
Me va que ni pintado.
Me encantas!
Un abrazo!
Hola!!! que alegría verte por aquí, de verdad. Y qué mejor que ser el lugar de alguien, y que a la vez ese sea nuestro propio lugar. La casualidad, las casualidades, son, ocurren y nos rodean y de ellas surgimos y somos, no?. Y la casualidad me llevó en un momento a tu casa, te acuerdas? y fíjate lo que me cambió, ni tú misma lo sabes, pero fue, ocurrió y bueno, la aprovechamos y nos cambian, nos hacen o la hacemos nuestra, al fin es lo que cuenta, hacerlas nuestra.
EliminarUn beso grande!!
Un solo cuerpo...
ResponderEliminarSi.
Eso.
Besos.
Uno
EliminarSi
Y muchos besos.
me encanta la pureza de sentimientos
ResponderEliminarque te envuelven cuando escribes tu verso
Y a mí me gusta verte por aquí :)
EliminarUn abrazo.
Entrar y salir del mundo, hacer de el un lugar para estar, para poder irse también. La foto me atrapó cuando la ví, Lhasa también. Un beso
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