Y es a veces la marea de la vida
la que se desborda
disolviendo el borde
exquisito
la línea capaz de hacer nido
más allá de la lógica
en ese lugar cálido
desnudo de egoísmo
donde la única música
nace de las entrañas que vibran
donde el amor no se mide
ni tampoco se explica
donde el momento rebosa
las manos sienten
y los ojos acarician
donde los instantes están llenos
y se construyen los siguientes
ese lugar apenas rozado por muchos
ese lugar privilegiado
encuentro del destino
donde cuesta llegar
pero que existe
ese lugar que solo acoge
la única verdad
la que suda desde la piel
la que no se puede maquillar
la que deja fuera resplandores falsos
y solo anida en quien la sabe nombrar
en quien se siente nombrado
aceptado
acogido
y sabe aceptar
ese lugar
borrado
disuelto
ahogado
pero que existe
y es por ello
la verdadera herida.
La piel es el lugar en el que TODO empieza y se desarrolla, en ella está nuestro "elán vital".
ResponderEliminarÉlan vital.
EliminarPerdón.
La que nos contiene y nos define. La que es capaz de traducir el roce y trasmitir el alma.
EliminarNo conocía ese término y fui a buscarlo, :)
Gracias por estar, Ilduara.
El viento sopla, la arena se esparce .. .pero aunque la forma cambia, la esencia perdura.
ResponderEliminarMi abrazo a tu luz Carmela.
Una esencia que es imborrable.
EliminarUn abrazo, Athenea.
Esas fotos dan paz...
ResponderEliminarBesos y salud
Sí que la dan, Genín, paz y calma, e invitan a pensar y meditar.
EliminarBesos y salud.
Que delicia de poema, y de fotos...
ResponderEliminarGracias.
Besos.
Gracias a ti, por ser, por pasarte siempre y por ser como eres.
EliminarUn beso
Maravillosas fotografías y poema. Buena semana.
ResponderEliminarGracias, Teresa, tambien te deseo buena semana para ti.
EliminarBesos.
Qué bonito , Carmela. Y qué difícil es llegar a ese lugar, en ocasiones.
ResponderEliminarBesos
Sí que es difícil, Celia y perderlo es una herida sangrante.
EliminarOye y me he quedado preocupada con lo que comentas en casa de Toro, espero que estés bien y se solucione todo.
Un abrazo enorme
La herida termina sanando,a su tiempo. Pero sin duda que la paz de esa playa, de ese sol, ayuda y mucho. Un beso
ResponderEliminarNo estoy segura, Fio, pero lo que si coincido es en la paz de esa playa :))
EliminarUn beso.
¡Qué lindo tu blog! Me quedo.
ResponderEliminarEspero te guste el mío. Saludos.
Gracias, Martina, bienvenida.
EliminarVisitaré el tuyo :)
Saludos
Letras e imágenes una belleza. Transmiten paz.
ResponderEliminarUn cálido abrazo Carmela
Me alegra que te guste, Sneyder. Gracias
EliminarUn abrazo para ti y besos.