Y supe que era éste el tiempo justo del abandono y la entrega, de tutear al deseo, de dejar hueco al asombro y bucear profundo el instinto para encontrar y habitar la casa de la luz donde todo es delicia y calma, rumor de olas blancas y olor a ti. Y tiempo, al fin, de recibir la savia de tu entrega y ansia. Torrente delicado e intenso que me recorre con el fulgor del deseo y la infinita ternura de la gota que demora,
resbala,
y sacia.
Llega el momento, si llega, en que, de manera natural se recogen los frutos sembrados, maduros.
ResponderEliminarMuy bueno. Un abrazo grande y por un día de paseo, que se oree el interior, o quedarse en casa, con el amor soñado, quizás más gozoso
Y saborear esos frutos, es una delicia :))
EliminarYo tuve que conformarme con ver a la gente pasear desde el balcón. Pero fue hermoso escuchar voces y risas.
Un beso, Albada.
Me quedo en esa gota (la de la fotografía y la de tu prosa poética) que demora, en ese aferrarse para dejarse ir poco a poco, lenta y conscientemente, en un alargado presente.
ResponderEliminar¿Qué decirte, Carmela? Bello, como siempre.
Besitos
Tú sabes bien dónde quedarte, en ese alargado momento.... disfrutándolo. Pillina!
EliminarGracias, Alis, y muchos besos.
Tejes lo mismo la prosa que la poesia, con filigrana exquisita, es un lujo haberte encontrado. Saltibrincos
ResponderEliminarUn placer que comparto contigo, Ester: el de habernos conocidos, :))
EliminarBesos grandes.
La gota se demora en su caída, en ella está el viaje y el fin.
ResponderEliminarBesos.
Lo viste bien, Alfred: el viaje y su fin!
EliminarBesos!
Bom dia:- Maravilhoso de ler. Puro e doce fascínio de prosa.
ResponderEliminar.
Feliz Sábado
Cuide-se
Bom dia, Ryc@rdo, e obrigado por parar e por suas palavras, você é muito gentil comigo.
EliminarBom dia e tome cuidado, você também.
Un beso!
Muchos de los que tienen que tomarse una tila para tranquilizarse es porque no han descubierto tu blog. Ideal para confinamientos.
ResponderEliminarBesos.
jajjajaja me hiciste soltar una carcajada, Macondo. Eres increíble. Gracias.
EliminarBesos, contentos.
Pura delicia tus palabras, creo que merece la pena tutear el deseo ..
ResponderEliminarAbrazos Carmela un placer leerte.
Tutearlo y darle un empujoncito, si se hace el distraído, Campirela, y nunca dejarlo pasar!
EliminarUn beso grande para ti.
Abandono, entrega, deseo, asombro, instinto, delicia, calma, recibir....
ResponderEliminar¿Quien no querría ser ese torrente?
Es el tiempo justo. Y deseamos que lo sea más veces. Que dure, que se repita.
¿Que bien lo escribes!
Cierto Guille, busquemos de hacer que ese tiempo justo sea perenne, no?
EliminarYo quiero ser y, a la vez, recibir ese torrente. Se pueden pedir las dos cosa, no?? jajajaja no creo que sea abusar...
Gracias, Guille, y besos!!
...dejar hueco al asombro y bucear profundo el instinto para encontrar y habitar la casa de la luz...
ResponderEliminar¡Qué bonito lo has dicho!
Un abrazo Carmela
Me alegra que te guste, Loles Miva, :))
EliminarBeso muy grande.
Y después de bucear profundo y encontrar la calma, me quedo con este final "Torrente delicado e intenso que me recorre con el fulgor del deseo y la infinita ternura de la gota que demora,
ResponderEliminarresbala,
y sacia."
Todo el poema es exquisito Carmela.
Te dejo mis cariños para este finde.
Y esos cariños, saben a gloria.
EliminarBesitos y cuídateme.
Para delicadeza, intensidad y ternura..., la gota, tus palabras, la imagen toda.
ResponderEliminarAbrazos mujer de agua salada... y brava. (El agua...)
:))))))
Ahora de secano, jajajaja
EliminarUn abrazo, Ernesto.
Bellos versos, que fluyen como esa savia vital. Como esas palabras finales que cuelgan como gotas de agua. Saludos!!
ResponderEliminarMe alegra que te hallan gustado, David.
EliminarUn abrazo!
El momento hermoso y placentero en tus preciosos versos, Carmela.
ResponderEliminarSiempre es un disfrute recorrer tus versos.
Un besito
Gracias Ana, por pasarte y por tus cariñosas palabras.
EliminarUn beso grande!
La caída de la gota, a cámara lenta. Me gustó como la captaste y como te dejaste llevar.
ResponderEliminarBesos bonita.
Es un gusto dejarse llevar :)) y caer!
EliminarBesitos, Laura.
Tu blog es justamente eso que tú dices en tu entrada de hoy el lugar "justo del abandono y la entrega , de tutear al deseo y dejar hueco al asombro" Esta entrada es una pasada que te da para imbuirte dentro de un mar de sensaciones increible.
ResponderEliminarUn beso muy grande guapa.
Adentráte y disfruta, Tracy. :))
EliminarGracias!
Besos.
Los instintos, esos magicos compañeros que nos trastoca el momento y nos lanzan al vértigo irremediable de los placeres de la vida, sin armaduras pero con toda la capacidad de la locura.
ResponderEliminarEn el deseo se cae así, lentamente, por gravedad y peso como tu gota de agua en su tiempo justo.
Genial!!
Un abrazo.
Genial, es lo que tú dices, Agapxis, me ha gustado mucho. La capacidad de "trastocarnos de los instintos", es genial! y esa capacidad de conservar ese punto de locura, qué seríamos sin ella??
EliminarGracias por tus palabras, Agapxis.
Un beso.
Bucear profundo en el instinto. Toda una aventura, seguramente. (Ya no me acuerdo bien)
ResponderEliminarEso creo, Noxeus, que es una gran aventura. ¿Y, seguro que no? :))
EliminarUn beso.
El instante exacto del desprendimiento de la gota suena como un beso.
ResponderEliminarBss
Lo oíste??, yo también :))
EliminarUn beso.!
Ese tiempo en su excelso regocijo que va macerando tan dulce elixir…
ResponderEliminarPrecioso y exquisito, mi querida amiga… Un verdadero deleite…
Abrazos y cariños enormes 💙
Siempre las palabras perfectas, Gine :)), gracias, por dejarlas.
EliminarBesos.
Es increíble como has captado esa gota que demora, resbala y sacia en la hoja. Si nos fijamos bien en ella, podemos ver reflejado todo el entorno que la rodea. Tus palabras, como siempre, están llenas de sensualidad y delicadeza.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Carmela.
Te fijaste bien, Jordi, como buen fotógrafo. Se ve todo el jardín.
EliminarGracias por tus palabras.
Un beso.
"...la casa de la luz donde todo es delicia y calma, rumor de olas blancas y olor a ti. Y tiempo, al fin, de recibir la savia de tu entrega y ansia. Torrente delicado e intenso que me recorre con el fulgor del deseo y la infinita ternura de la gota que demora,
ResponderEliminarresbala,
y sacia."
Impresionante, Carmela. Me eximes de mayores comentarios.
Abrazo admirado. Y no te digo nada que no sienta ni quede comprobado con la lectura de lo que copiado y pegado.
Me alegra que te guste, Carlos!
EliminarUn fuerte abrazo.
Por favor agrega "he" entre "que" y "copiado"... Eso me pasa por sentir y descerrajar lo que siento sin tantas vueltas ni tanto.
ResponderEliminarComo delicada caricia fluye esa gota de savia y encuentra el cause de quien la desea. Un sutil erotismo se vislumbra. La música siempre calma.
ResponderEliminarBesos dulces y dulce fin de semana Carmela.
Un cauce, que hay que cuidar y mimar!
EliminarBesos para ti, Dulce.
Calma es lo que tú nos transmites, Carmela... es como si esa gota recitara antes de volar, caer... fundir su existencia con la tierra o el aire. Precioso.
ResponderEliminarMil besitos con cariño para ti ♥
Me alegra que lo sientas así, Auro, y te llegue su calma contenida....antes de caer, :))
EliminarBesos con mi cariño!
Solo pienso en sumergirme en el mar, enfriar la mente y que el agua resbale dejando surcos de sal que coloreen la piel de dorado.
ResponderEliminarSaludos!
Te entiendo bien :))
EliminarYo también lo deseo.
Un beso.
El deseo que anida en el instinto verbaliza la entrega en gotas anhelantes de tierno éxtasis.
ResponderEliminarUn beso.
tus palabras, siempre poesía :))
EliminarUn beso grande, Ilduara.
Bello de toda belleza, me ha encantado pasear por tu lugar. Tus letras destilan pureza, sensibilidad y deseo. Leerte es un descanso para el alma.
ResponderEliminarMe tendrás seguido no lo dudes.
Un beso inmenso y te pongo en mis favoritos
Juan
Hola, Juan de la Cruz. Después de leer tu última entrada: "Ventana", es todo un elogio para mí, que te guste pasear, por aquí, y encuentres, ese descanso. Tu calle, siempre lo es.
EliminarUn beso!
Mi querida Carmela, brillas en esta entrada,con tu prosa poética delicada y profunda.
ResponderEliminarMe encantas, de verdad que me encantas.
Un beso enorme!
Geacias, Lunaroja. Tú también me encantas a mí, y sabes que es verdad.
EliminarBesos muchos.
Esa gota dibujada por ti, habla por si sola y dice mucho.
ResponderEliminarUn placer leerte amiga Carmela.
Un abrazo
Y tu sensibilidad la lee, bien.
EliminarGracias Carmen.
Besos.
Me ha encantado.
ResponderEliminarBesos.
Gracias, Amapola.
EliminarUn beso grande.
Siempre llega ese tiempo justo....aveces tarde o temprano. Saludos amiga.
ResponderEliminarEs solo cuestión de tener ganas y desearlo, paciencia y esperanza de conseguirlo.
EliminarBesos grandes, Sandra.
Hola Carmela. Cómo estás? Qué hermoso es leer tus finos y delicados versos. Me transmiten calma y paz interior... Y aquella gota de tu poesía se desliza suave por mi mejilla para acariciar mi piel y sentir que sigo viva.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Cuídate mucho.🌷😘
Hola Nuria Lourdes. Bienvenida por esta casa que espero que encuentres agradable. Gracias por tu visita y por tus lindas palabras, muy cariñosas.
EliminarCuídate tú también.
Un beso!
Demora, resbala y sacia...
ResponderEliminarAhí es nada!!!
Besos.
:))
Eliminar:))
Besos, Toro.:))
Pero que precioso lo que escribes Carmela. Un abrazo.
ResponderEliminarTú siempre me lees con mucho cariño :)
EliminarBesos.
Maravillosa esa gota de ternura :)
ResponderEliminarMe encantan este tipo de fotografías que captan el detalle, tan delicadas.
Un beso, Carmela.
Hola, Rosa. Me alegra que te guste.
EliminarTu siempre pones en tu blog unas fotos maravilosas, acompañando a tus entradas.
Un beso grande.
Esa gota que es caricia y se desliza con la palabra de tu latido, la que nos acercas, la gota que bebemos de tu jardín, la pócima mágica que nos adentra en el maravilloso mundo de la naturaleza y la poesía. ¡¡¡¡Qué maravilla!!!!
ResponderEliminarQue estés teniendo un feliz día de la madre.
Un beso enorme.
Gracias, María. Siempre tan generosa con tus comentarios para mis palabras :))
EliminarTe deseo lo mismo.
Besitos!!
En la espera reside esa sorpresa, que la vida en un rincón de un instante que creíamos adormecido, va y ns regala.
ResponderEliminarLa delicadeza y la fragilidad del tiempo nos ofreces entre imágenes y versos.
Gracias, Carmela.
Besos.
Gracias a ti, por sentirlo así :))
EliminarUn beso.
nos
ResponderEliminarOtro beso!
EliminarNo siempre es fácil saber cuándo es el momento justo.
ResponderEliminarBesos.
El cuerpo sabe....
EliminarUn beso!
Tu prisa poética acaricia el alma. Vuelvo sobre ella para disfrutar e inundarme de la belleza que se cobija en tus palabras.
ResponderEliminarUn beso enorme
Gracias, Ana, de corazón.
EliminarBesos.
Prisa no... (errata). He querido escribir prosa
ResponderEliminarMás besos.
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